La forma de pensar y desarrollar los negocios cambió desde hace ya algunos años, principalmente por los efectos del cambio climático y por las oportunidades que el mundo brinda para economías como la Argentina, fuerte en recursos naturales. La creciente demanda por bienes y servicios más eficientes y de mayor calidad nos pone frente a un escenario que no debe dejar de aprovecharse.
La bioeconomía suele definirse como la producción sustentable de bienes y servicios mediante el uso o la transformación de recursos biológicos. En otras palabras, hacer y aplicar tecnología para ser más eficientes, dos aspectos en los que las políticas públicas muestran signos débiles aún, sobre todo cuando se las compara con países que llevan la delantera en estos temas.
El año pasado, tuvimos la oportunidad de dialogar sobre esto junto a un referente en la materia y actual Secretario de Bioeconomía, Fernando Vilella. Te dejamos esta interesante charla acá:
Hacia donde vamos:
El domingo 10 de diciembre marcó el inicio de una transformación en el agro argentino con la asunción de Javier Milei. Entre las sorpresas, se destaca la creación de la Secretaría de Bioeconomía, liderada por el experto Fernando Vilella.
Bioeconomía: cimiento del futuro sustentable
La bioeconomía, pilar de desarrollo sustentable, se erige como la guía para la gestión de Vilella. Desde bioproductos hasta biomateriales, la visión integral promete un agro más sostenible, abandonando combustibles fósiles y promoviendo el uso de materias primas renovables.
Objetivos claros con acciones decididas
Vilella traza seis ejes estratégicos:
- visión federal,
- economías regionales,
- sostenibilidad,
- aumento de exportaciones,
- inversión,
- ciencia e innovación.
Un enfoque decidido en la bioeconomía y sustentabilidad, con desregulaciones efectivas y esfuerzos para duplicar exportaciones.
Ya confirmado en el Gabinete, adelantó que las regulaciones van a desaparecer durante el primer mes de gestión.
En el negocio agrícola, indicó que se quitarán los volúmenes de equilibrio que existe para exportar maíz y trigo. También desaparecerán los fideicomisos en trigo y girasol.
La Secretaría potenciará relaciones internacionales, destacando el Mercosur como clave. El trabajo conjunto con la Canciller, Diana Mondino, ya está en marcha. Para ser más seductor a los productos argentinos, la secretaría piensa en mayor agregado de valor y establecer una trazabilidad de huella de carbono.
Desafíos en la producción animal
En este sentido, Argentina se enfrenta a grandes retos. Villela destacó que en ganadería vacuna el país quedó estancado, a diferencia de los pollos y cerdos. Por ello, se le dará gran importancia a la necesidad de aumentar las exportaciones de proteína animal, superando estancamientos y exportando carne, no solo alimento para animales.
Confirmó que se eliminarán los cupos para exportar carne y se podrá exportar los 7 cortes populares que están prohibidos actualmente.
Tecnología e innovación en el horizonte
La gestión de Vilella promueve la adopción de tecnologías avanzadas. La clave para mantener la competitividad y liderar la innovación en el agro argentino.
En esta área se incluye la defensa de la propiedad intelectual en materia de semillas, pero también incluye las industrias biotecnológicas.
El rol clave del agro en el futuro
Vilella enfatiza el papel crucial del agro en la seguridad alimentaria a nivel internacional. La gestión buscará aumentar exportaciones y mejorar la microeconomía del sector, preparando el terreno para un agro más fuerte y sostenible.
Para comprender a fondo este cambio de paradigma, te invitamos a ver el #Masterthink realizado el año pasado junto a Fernando Vilella. Sumergite en las perspectivas del agro argentino y descubrí cómo estas decisiones estratégicas marcarán un antes y un después en la industria.
